Princesa De Cuento (Vega)

Cuando los cuentos cuentos son ...
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Erase una vez que se era la protagonista de sexo femenino de un cuento. Erase una vez que se era el protagonista de sexo masculino de un cuento.

Resultose que ninguno era del común denominador, que por otro lado se agradecía pues basta ya de tanta estulticia.

Jijijajá, jijijajá, se fue forjando un amago de amistad. Jijijajá, jijijajá, se fue mascando ¿el final? -no creo ...-.

Una mañana fría, lluviosa, gris, con truenos y relámpagos, se vislumbró que ya no se daba más de sí, que no se veía prácticamente nada salvo un fantástico producto de mercadotecnia que poco tenía que ver con ella, que no necesitaba de publicidad y que elegía y decidía por sí misma y cuyo único aliciente era el del interior humano. Que lo único que anheló -si acaso- un día fue a llegar a acercarse a quien está detrás de tanto magín. Quien, por otro lado, y por contra de cuanto intenta decir, nunca confió en ella y la trató como a cualquier otra piedra que encontró en el camino a la realización.

Que, de todos modos, tal vez no sea así. Pero que es lo que se otea desde el margen del río.
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Sólo me interesa el fondo. No es tan difícil. Para la forma ... están todos los demás ...

Vega – Princesa De Cuento