Rabia, decepción e impotencia.
¿Puede acaso alguien decidir dónde está el límite de tu intimidad? Algún grandilocuente, tal vez, se crea con derecho a hacer y deshacer a su antojo. Y es que hay quien está acostumbrado a que le bailen el agua ... Quien se permita, además, ir de víctima ...
Acción, reacción, repercusión. Estupidez humana, enfado, adiós.
Niña no te enfades, quién no merezca tu aprecio tampoco merece un disgusto tuyo.
ResponderEliminarUn besito.
Más que enfado, que lo hay, hay decepción ... mucha ...
ResponderEliminarbsos!!
Un hasta luego Lucas y que le vayan dando.
ResponderEliminar¡Suerte!
Antonio